- Comentario de las Coplas a la muerte de su padre de Jorge Manrique (I)
- Comentario de las Coplas a la muerte de su padre de Jorge Manrique (II)
- Comentario de texto de las coplas de Manrique (III)
- Comentario de texto de las coplas de Jorge Manrique (IV)
ESTRUCTURA MÉTRICA
Las coplas se extienden a lo largo de cuarenta unidades estróficas denominadas coplas de pie quebrado y compuestas cada una de ellas por dos sextillas. Queda, pues,tejida cada estrofa por doce versos
Las características métricas de las que participan todas las estrofas son la alternancia de dos versos octosílabos y uno tetrasílabo. Aunque,en rigor el mencionado tetrasílabo suele convertirse en un pentasílabo.
Como en los siguientes casos :
III :”…qu’es el morir…”
“…e consumir…”
XXVII:”…e batallar…”
‘”…e trabajar…”
XXXI”…en jouventud…”
“…en senectud…”
XXXV:”…no verdadera…”
“…pereçedera…”
En algunos casos, la mayoría, estas aparentes irregularidades lo son sólo desde la perspectiva de la métrica moderna. Sí, porque en la métrica medieval y en concreto en la ejecución de este tipo de estrofa, la copla de pie quebrado, el primer verso de un tetrasílabo podría considerarse unido a la última sílaba del verso anterior si éste acababa en una sílaba con final vocálico.
Otras veces, parece que también se tolera unir la última sílaba del verso del tetrasílabo, siempre que acabara en una sílaba con final vocálico, al verso siguiente si éste comenzaba por una vocal.
En algún caso sin embargo, como en el que hemos citado de la estrofa XXXV, el verso es pentasílabo y, por tanto, irregular, sin que pueda aplicarse ningún tipo de licencia poética que lo convierta en tetrasílabo.
Señalemos cómo los versos irregulares suelen aparecer no aislados sino de dos en dos y subrayemos que guardan con frecuencia una estrecha relación en cuanto al significado, dentro de las estrofas que los albergan.
Así, por ejemplo, podemos observar en diversas ocasiones una relación antitética( “juventud-senectud”,ni verdadera”-“perecedera”; de proximidad conceptual( ” e batallar”-“e trabajar”,”qu’es el morir”-“e consumir”),pero, en cualquier caso, significativa y nos induce a pensar que el autor no dejó de la mano de Dios los versos pentasílabos sino que aprovechó esta sutil variación del ritmo de cantidad en las estrofas con intencionalidad significativa.
Fijémonos en que los pentasílabos por su disonancia con la armonía del conjunto atraen especialmente nuestra atención. Podríamos decir, incluso, que forman una suerte de contraste en relación con el resto de versos si son tetrasílabos (aparte de la oposición que mantienen los tetrasílabos en sí con los octosílabos.
)Unas veces (juventud-senectud)la presencia de pentasílabos remarca el contraste y ,cuando los versos pentasílabos no están opuestos conceptualmente entre sí, lo están con respecto a otros elementos de sus estrofa. Con frecuencia realizan este contraste con los otros dos versos tetrasílabos de la misma estrofa que suelen encerrar conceptos distintos a los de aquellos. Así, por ejemplo:
III “… qu’es el morir…”
…e consumir…”
se oponen a :
“…e más chicos…”
“…e los ricos…”
La Muerte y la consumición niegan a los términos “rico” y “chico’ Son incompatibles con ellos dado que la Muerte no hace distinciones de ningún tipo y, en consecuencia, cualquier diferencia artificial entre los hombres creada por ellos mismos carece de fundamento.
Resumamos afirmando que el autor cuida celosamente la medida de los octosílabos pero se reserva la posibilidad de permitirse cierta libertad en el metro de los versos tercero,sexto,noveno y décimo segundo de cada estrofa; es decir, los tetrasílabos, y aprovecha la licencia de chica de su época para “alargarlos” y de este modo asignarles un papel especial desde el punto de vista significativo.
Salvada esta peculiaridad, todos los versos se acogen a las exigencias del arte menor y a las pautas de la llamada doble sextilla, copla de pie quebrado o, en honor a nuestro autor, copla manriqueña.
La rima, en cambio discurre por la composición prácticamente des- provista de impurezas. Se sujeta en todo momento a unas condiciones fijas:la consonancia
La estructura de las rima, a lo largo de las Coplas es idéntica en todas las estrofas estrofas y en todas las sextillas.
Si tomamos el conjunto de cada doble sextilla, vemos que riman de esta forma:
8a-8b-4/5c-8a-8b-4/5c 8d-8e-4/5f-8d-8e-4/5f.
Del mismo modo que cambia la rima de una sentina a otra,lo hace de una estrofa para otra sin que se observe ningún tipo de disposición significativa por parte del poeta, sino, simplemente, un orden aleatorio que va dando variedad a la musicalidad. No obstante, podemos hacer algunas observaciones.
La rima cambia para abordar un tema distinto o-mucho más exacto en numerosas ocasiones- para acometer un matiz o un aspecto antes no tratado de un tema ya barajado. En este aspecto el desacuerdo,en cuanto a rima,apreciable entre las dos sextillas de cada copla indica igualmente una cierta variación o incidencia temática.
La rima, como hemos visto, es, en definitiva consonante.Observemos que el empleo de este tipo de rima confiere a la creación una musicalidad rotunda, severa que se acomoda perfectamente a la solemnidad de los temas y del tratamiento que se les ha dado. Aunque también es cierto que el lenguaje de este escrito es exponente de una época en la que aún se desconocía los poemas de rima libre o inexistente, como ignoraban el metro libre, y evidentemente en la elección de este tipo de rima actuó al sobre el autor motivos de tradición literaria. No obstante, ello no priva del elogio al empleo que ha hecho el autor de a este recurso.
Consignemos el acierto del,” autor al aplicar la copla de pie quebrado a una composición elegíaca vadeando de este modo la pesadez retórica del verso de arte mayor utilizado tradicionalmente en este tipo de composiciones. El cambio de un metro a otro ha sido fundamental,d ado que el ritmo ha adquirido una mayor fluidez en beneficio de las cuestiones planteadas.
El ritmo de intensidad o acentual al presenta algunas variantes. El acento inicial se sitúa lo mismo en la primera que en la segunda sílaba :
I :”Recuerde el alma dormida…”
“…Cómo a nuestro parescer
Otro tanto acontece, como hemos señalado,con el acento final de cada verso, el acento estrófico. Acostumbra a ser llana la palabra final,pero en numerosas ocasiones nos encontramos con rimas agudas que prestan una especialidad musicalidad al verso. Ritmo trocaico por lo demás en toda la composición.
Un cambio en la rima implica hasta cierto punto un cambio en el ritmo, entanto que los sonidos pronunciados al final del verso-lugar clave-sin los que quedad más marcadosren nuestro oído y los que en mayor medida inciden sobre la musicalidad.
Versos octosílabos,tetrasílabos, pentasílabos; y cambio de rima en sextillas y estrofas… es evidente que las coplas presentan una gran variedad formal.
Comentario de las coplas de Manrique (1) 3