Tabla de contenidos
- Análisis del Tema
- Análisis del Tema en un comentario de texto
- Ejercicio sobre el análisis del Tema
- El trabajo con el Tema
- Ejercicio sobre el trabajo con el Tema
- Cómo se redacta el tema de un texto
- Ejercicio sobre las características del Tema
- Estructura del Tema en un comentario literario
- Ejercicios resueltos para practicar el tema
- Aprendizaje del Tema. Práctica
- Práctica sobre la redacción de un tema
- 4 ejercicios resueltos sobre el tema
- Ejercicio resuelto, la redacción de un Tema
- Plantilla para hacer el tema en un comentario de texto
CURSO BÁSICO DE ANÁLISIS DEL TEMA EN EL COMENTARIO DE TEXTOS
Ejercicio resuelto nº1
En esta parte final de este curso de introducción al análisis del tema en los comentarios de textos literarios, te proponemos unos ejercicios resueltos.
Lo que debes hacer en todos los ejemplos es indicar cuál la palabra abstracta (*Palabra abstracta principal) que mejor recoge el contenido de cada uno de ellos
Poema de Jorge Manrique
Copla III de las (Coplas a la muerte de su padre
Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
que es el morir:
allí van los señoríos,
derechos a se acabar
y consumir;
allí los ríos caudales,
allí los otros medianos
y más chicos;
y llegados, son iguales
los que viven por sus manos
y los ricos.
Poema de Jaime Sabines
Te quiero a las diez de la mañana
Te quiero a las diez de la mañana, y a las once, y a las doce del día. Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo, a veces, en las tardes de lluvia. Pero a las dos de la tarde, o a las tres, cuando me pongo a pensar en nosotros dos, y tú piensas en la comida o en el trabajo diario, o en las diversiones que no tienes, me pongo a odiarte sordamente, con la mitad del odio que guardo para mí.
Luego vuelvo a quererte, cuando nos acostamos y siento que estás hecha para mí, que de algún modo me lo dicen tu rodilla y tu vientre, que mis manos me convencen de ello, y que no hay otro lugar en donde yo me venga, a donde yo vaya, mejor que tu cuerpo. Tú vienes toda entera a mi encuentro, y los dos desaparecemos un instante, nos metemos en la boca de Dios, hasta que yo te digo que tengo hambre o sueño.
Todos los días te quiero y te odio irremediablemente. Y hay días también, hay horas, en que no te conozco, en que me eres ajena como la mujer de otro. Me preocupan los hombres, me preocupo yo, me distraen mis penas. Es probable que no piense en ti durante mucho tiempo. Ya ves. ¿Quién podría quererte menos que yo, amor mío?
Poema de Luis Cernuda
Quiero, con afán soñoliento…
Quiero, con afán soñoliento,
Gozar de la muerte más leve
Entre bosques y mares de escarcha,
Hecho aire que pasa y no sabe.
Quiero la muerte entre mis manos,
Fruto tan ceniciento y rápido,
Igual al cuerno frágil
De la luz cuando nace en el invierno.
Quiero beber al fin su lejana amargura;
Quiero escuchar su sueño con rumor de arpa
Mientras siento las venas que se enfrían,
Porque la frialdad tan sólo me consuela.
Voy a morir de un deseo,
Si un deseo sutil vale la muerte;
A vivir sin mí mismo de un deseo,
Sin despertar, sin acordarme,
Allá en la luna perdido entre su frío.